Alicia Barabas y Miguel Bartolomé
Si bien este homenaje reconoce una amplia trayectoria académica, forjada al interior del Instituto Nacional de Antropología e Historia, celebra a su vez el espíritu de colaboración entre dos investigadores que encontraron en los pueblos indígenas un proyecto común, aun cuando éste es a menudo el menos común de los proyectos. A lo largo cincuenta años, los nombres de Miguel A. Bartolomé y Alicia Barabas han estado estrechamente asociados a las configuraciones étnicas de nuestro país, cuyas realidades serían aún desconocidas sin las obras que nos han legado de manera individual o compartida. El homenaje es así una distinción necesaria a una obra que no sólo destaca por la variedad de sus temas y la amplitud de sus problemáticas, sino también por la unidad de sus reflexiones y la constancia de sus objetivos. Situar esta obra en el horizonte de la antropología mexicana equivale sin duda a reconocer su importancia, pero implica a su vez reservar un lugar en nuestra memoria colectiva.